La adaptación de la mítica serie de Nickelodeon resultó ser satisfactoria y parece ser que está cumpliendo con las expectativas del público, y ya sea que seas nuevo viendo esta serie, o estás dentro de los fans más fieles desde que se estrenó la serie animada en 2005, te aseguramos que este live-action en Netflix, estrenada apenas el 22 de febrero, te encantará.
Una adaptación de esta magnitud, de entrada tendrá muchos ojos puestos sobre ella, es por eso que esta serie tiene todo para conquistar a una nueva audiencia masiva: una historia de un héroe clásica pero interesante, un mundo y una mitología muy atractiva, personajes mágicos y por supuesto, la aventura, que siempre será un género muy efectivo.
Lo primero que hay que aplaudir de la adaptación de Netflix es el resultado visual: destacando especialmente las escenas de pelea y los efectos especiales para llevar a imágenes “reales” los poderes de fuego, agua, aire y tierra de los maestros. Resulta emocionante ver a los personajes lanzar bolas de fuego o levantar la tierra bajo sus pies, así como lo bien hecho que está el bisonte volador que utiliza el protagonista como mascota y medio de transporte y claro, también el lemur volador que los acompaña.
Pero lo que hay que destacar, es el excelente trabajo y carisma del protagonista de la serie, Gordon Cormier (Aang) que se desenvuelve de una manera muy natural y tiene esos matices espectaculares que una serie como esta requiere y tiene que ser.
Si bien la serie original estaba dirigida a un público más infantil, no cabe duda de que Netflix busca en Avatar: La leyenda de Aang a un público familiar pues ante todo, estamos en el viaje de este héroe, el del pequeño Aang que está destinado a convertirse en Avatar, es decir, en el legendario guerrero que domina todos los elementos y puede traer paz a un mundo devastado por la codicia del Reino de Fuego.
En conclusión, Avatar: La leyenda de Aang cumple con todos los objetivos: representa la historia de una forma amena, logra sumergirnos en este mundo mágico donde consigue transmitir la grandeza de los escenarios y la mitología te envuelve consiguiendo que nos encariñemos con sus jóvenes estrellas.